jueves, 25 de octubre de 2007

Puedo contagiarme una enfermedad en el momento de donar sangre?

Uno de los temores típicos o excusa para no ir a donar sangre, es el temor a contagiarse alguna enfermedad. Este temor está TOTALMENTE infundado, ya que todos los materiales utilizados en la extracción de sangre, son absolutamente descartables e imposibles de reutilizar.
Es imposible de reutilizar, ya que las bolsas de extracción vienen conectadas a la aguja con la que se punza la vena de modo solidario. Es decir que al cortar dicho tubito luego de la donación, hace IMPOSIBLE la reutilización. Por lo tanto, un uso y se descarta, lo que evita TODA POSIBILIDAD DE CONTAGIO entre donantes.

viernes, 19 de octubre de 2007

Por más como Eugenia

Hola, soy Eugenia y ya estuve comentando otros artículos publicados en este blog. Al leer este, encuentro que estoy de acuerdo con la apuesta a una donación altruista y voluntaria y de mi experiencia como donante regular de sangre y plaquetas les puedo decir que los puntos que remarcaron (donar sangre cuando me siento bien, en lo posible siempre en un mismo establecimiento, etc.) no son difíciles de cumplir si se incorpora la idea de la donación como un acto positivo, realmente solidario y desinteresado. Les aseguro que, también en este caso, lo que uno da con cada donación vuelve, porque en el establecimiento donde yo suelo donar encontré gente muy macanuda, con la que vuelvo a encontrarme una y otra vez y que siempre que voy me hacen sentir muy cómoda. En resumidas cuentas, donar para mí ha sido siempre un momento grato, que se pasa con personas que te cuidan y se preocupan por tu bienestar. Felicito al Comité de este blog porque es una manera de mostrar que detrás de la donación de sangre hay toda una red de contención, cuidado y sobre todo, de buenas personas! Gracias, Eugenia

jueves, 18 de octubre de 2007

Día Internacional de Lucha contra el Cáncer de Mama

El 19 de octubre se conmemora el Día Internacional de Lucha contra el Cáncer de Mama, por eso los invito a usar una cinta rosa que presentifique la toma de conciencia del ciudado que debemos tener hacia nuestro cuerpo en función de nuestra común condición humana. Esta invitación se pretende sostener durante todo el mes de octubre.

Aprovecho este espacio creado para difundir la solidaridad a partir de poder donar sangre por considerar que todas las acciones solidarias enfocadas al cuidado de las personas se encuentran encolumnadas en el mismo rumbo.
Como donante en algun momento y como receptor en otros, quiero compartir mi firme apoyo a estas nobles causas.

viernes, 12 de octubre de 2007

Queres que te contemos lo que nos pasa?....

Quién de nosotros alguna vez no se encontró frente a la situación de que algún familiar, amigo o conocido, atravesando un problema de salud se viera en la necesidad de conseguir donantes de sangre?.
Los que vivieron o viven esa experiencia, son concientes de la carga afectiva y emocional que envuelve al paciente y su entorno, generando otras complicaciones como cirugías postergadas o más días de internación.
Desafortunadamente, en nuestro país la casi totalidad del sistema de salud depende todavía del aporte de donantes de sangre llamados "de reposición", es decir, obtenidos entre el grupo de familiares, amigos, compañeros o conocidos del paciente. Este modelo genera una situación injusta y coercitiva.
Según los cálculos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, para que un país o comunidad tenga suficiente sangre se debe colectar el equivalente al 5 por ciento de la población. Las estadísticas de la Organización Panamericana de la Salud indican que "en las Américas, sólo Cuba alcanza esa meta. Estados Unidos 4.6%; Canadá, 3.3%; Uruguay, 3.5%; y en el Caribe, Curazao alcanza 4.1% y Aruba, 3.5%. El resto de los países de la región mantiene un nivel tan bajo como el 1%, lo que los hace altamente deficitarios". Muchos países desarrollados advirtieron temprano el problema e implementaron políticas públicas para reemplazar el modelo actualmente vigente en la Argentina, por uno mucho más solidario y seguro, cuya piedra angular está representada por la figura del donante altruista de sangre”: Representado por aquel individuo integrante de una comunidad, que decide ser solidario con la sociedad donando sangre en forma reiterada y habitual.
Este enfoque permite, entre otras ventajas adicionales, dar respuesta a aspectos básicos de la problemática de la salud: proveer sangre en forma adecuada y suficiente, con el mayor grado de seguridad para los pacientes que lo requieren. Los beneficios de esta forma de donar sangre son múltiples. La evidencia científica documentada muestra que la prevalencia de infecciones que pueden transmitirse a través de la transfusión, es mucho menor en el grupo de donantes voluntarios habituales, que en el grupo de los donantes de reposición (muchos de ellos de primera vez).
Esto nos enfrenta con un escenario que requiere de una transformación estructural y cultural contundente. Los procesos transformadores deben basarse en premisas claras y objetivos progresivos, a la vez que bien definidos. Algunos países, debieron invertir mucho tiempo y recursos para poder cambiar el paradigma, en una transición que llevó alrededor de diez años. Los individuos que integran una comunidad, suelen dar muestras de compromiso con ella, que se demuestra frente a situaciones de catástrofes o tragedias cuando estas golpean a la sociedad, en las que la respuesta solidaria es inmediata. Se trata entonces, que podamos recuperar un espacio para ejercer esa habitual solidaridad que nuestra población hasta no hace mucho ejercía, a través de un acto de enorme valor: darle respuesta a la necesidad cotidiana de cientos de semejantes que viven su propia tragedia.
El inicio de la transformación depende de cada uno de nosotros.
Donar sangre en forma habitual constituye un valor, ¨la solidaridad¨, que sólo se aprende ejercitándola.
Los requisitos básicos para ser donante son tener entre 18 y 65 años de edad, pesar más de 50 kilos, tener un buen estado de salud y valores de tensión arterial dentro de límites normales, no padecer anemia y no haber tenido prácticas de riesgo que faciliten el contagio de enfermedades infecciosas transmisibles por sangre. Al contrario de lo que suele suponerse, para donar sangre no es recomendable estar en ayunas. En cambio, es imprescindible llevar el documento de identidad. La donación puede realizarse en cualquier Banco de Sangre o Servicio de Hemoterapia público o privado. El proceso es sencillo. La extracción en sí misma no consume más de 10 minutos y todo el trámite demanda aproximadamente 45 a 60 minutos, según las características de cada lugar. Otro elemento a tener en cuenta es que la donación altruista de sangre, además de ser una cuestión de salud pública, es también una cuestión de educación. Por ello resulta indispensable desterrar ciertos mitos que producen una actitud negativa en la gente, como por ejemplo que donar sangre hace adelgazar, o engordar; que puede contagiar enfermedades. Es bueno tener en cuenta que todos los materiales que se emplean en la donación son descartables y por lo tanto incapaces de contagiar enfermedad alguna al donante y el paciente.
Entre el 19 y 21 de septiembre se realizó en Buenos Aires, en el Hotel Hilton, el XI Congreso Argentino de Medicina Transfusional, en el cual se presentó, un spot publicitario (puede verse completo en la web www.donandosangre.org) realizado con el fin de dar inicio a un proyecto avalado por la Asociación Argentina de Hemoterapia e Inmunohematologia desde su Comité para la Promoción de la Donación de Sangre Altruista y Repetitiva, cuyo objetivo es contribuir a lograr los cambios culturales necesarios para responder a las necesidades transfusionales de nuestra población basados en donantes altruistas y repetitivos.